De gira con La Morocha

Con la sonrisa que tiene cuesta imaginármela angustiada. Se llama Mariana, diseña para La Morocha y no para de reírse desde que nos saludamos. Me inquieta mucho que, en breve nomás, las leonas se disputan el campeonato mundial con Holanda y no quiero perderme ni el himno. Pero parece que ella supiera de mi ansiedad; habla claro, es sencilla y responde amablemente a mis preguntas.

Nos encontramos en una feria de Palermo donde la convocaron para mostrar sus diseños, aunque no tardará en confesarme que, “en realidad, me insistieron tanto que vine”. Es la primera vez que viene a Buenos Aires a presentar su colección de collares, prendedores, vinchas, hebillas, aros y demás. “Hacemos accesorios y remeras, principalmente, pero no traje casi nada porque vendimos todo en la última feria de Bahía Diseña", explica entusiasmada.

Es bahiense y vive en bahía asique quiero saber cómo llegó a esta feria. Para ser precisas, estamos en un bar, es el JAH Bar el que reúne las producciones de múltiples diseñadores en esta tarde primaveral. “…Si si, vieron unas fotos en nuestro Facebook y nos invitaron a participar”, me cuenta. Es que claro, cómo para no insistir, los collares son lindísimos y los aros muy cancheros, no?. Me encantan.

Cuando Mariana habla en plural se refiere a su hermana: “Yo creaba, no sabía vender, fue ella quien me ayudó a poner la cara para la venta y así arrancamos.” Y, como lo dice, parece que empezaron hace un montón pero no; no solo que ésta es su primera recorrida por la capital sino que La Morocha nació hace apenas un año y pico.

No va a perder la sonrisa cuando me cuente que gracias a un muy mal momento de su vida descubrió su vocación por el arte.“Los médicos me dijeron que, por un problema de salud grave, no podía seguir con lo que estaba haciendo, (trabajaba cocinando las tartas en una famosa casa de pastas), me deprimí y empecé a hacer collares de tela, mi hermana se los ponía y la gente la paraba por la calle porque a todo el mundo les gustaba. Así comenzamos… ”, relata con una simpleza magistral.

Todo muy rápido, ese “pedazo de tela”- como lo llama- pasó de circular entre los conocidos para seguir creciendo. “Fuimos a la primer feria de Bahía Diseña (el 20 de junio de 2009), nos comenzaron a llamar de todos lados y abrimos un showroom de muestras permanentes… fue un boom,” y nos reímos con una carcajada.

Lo que más me llama la atención son los collares; son coloridos, hay de tela, bordados, hechos con cadenas, con piedritas, metalizados, para todos los gustos. Ya está por comenzar el partido. “¿De dónde sacás las ideas para diseñar, Mariana?”, “son mías....”, hace una pausa y sonríe nuevamente: “Yo estaba mal, deprimida y canalizé todo por ahí”.

Seguramente, las risas de despedida contagiaron a las leonas. ☺